Nacional, Thursday 11 de January de 2018

Utilizaba una falsa identificación para poder ser atendido en el Hospital Interzonal. El ex cabo de la Policía Federal está acusado del secuestro extorsivo a un remisero de nacionalidad peruana, a quien le exigió dinero para no involucrarlo en una causa por narcotráfico.

Detuvieron a un ex cabo de la Policía Federal acusado de ser el líder de una banda de policías corruptos dedicada a secuestros extorsivos que se encontraba prófugo desde 2010. El hombre, de 50 años, se había internado en el Hospital Interzonal con un nombre falso luego de haber sufrido un accidente coronario.

El ex cabo de la Policía Federal, identificado como Carlos Daniel Maidana, fue señalado como el jefe de una organización criminal integrada por policías “desleales” involucrada en secuestros y extorsiones a ciudadanos extranjeros para no involucrarlos en falsas causas por narcotráfico.

“Trabajamos para que estos casos no queden impunes. Durante los siete meses que llevamos investigando, coordinamos con la Gendarmería una serie de tareas de inteligencia que nos permitieron hallar al prófugo a pesar de que utilizaba una falsa identificación”, aseguró la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.

La investigación estuvo a cargo de Gendarmería Nacional. A partir de intervenciones telefónicas, seguimientos y análisis de distintas bases de datos, efectivos de la Gendarmería Nacional obtuvieron información acerca de que este ex cabo de la Policía Federal había sufrido un accidente coronario y utilizado otra identidad para internarse en el Hospital Interzonal de Agudos de Mar del Plata, donde se produjo finalmente su detención a instancias del juez Sebastián Casanello.

Maidana permanecía prófugo de la Justicia desde fines de 2010, cuando fue desarticulada la organización criminal que encabezaba junto a otros integrantes de la Policía Federal. En ese entonces fueron detenidos tres hombres que señalaron a Maidana como el principal responsable de un secuestro extorsivo a un remisero de nacionalidad peruana, a quien le exigieron luego la suma de siete mil pesos para no involucrarlo en una causa por narcotráfico.

La pesquisa contó con la colaboración de personal de la Dirección de Inteligencia Criminal de la Gendarmería. Con los datos que surgieron, los uniformados dieron cuenta de la falsa identificación que utilizaba Maidana y de distintas maniobras elusivas que le posibilitaron evadir a la Justicia durante más de siete años. Finalmente, fue llevado a la Unidad de Procedimientos Judiciales de la provincia de Buenos Aires, previo traslado al Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N° 7.