Internacional, Sunday 31 de January de 2021

Rodney Baker, empresario de la industria del juego, y su pareja actriz se hicieron pasar por trabajadores de un motel de una comunidad indígena para ser vacunados. 

Rodney Baker, empresario de la industria del juego, y su pareja actriz se hicieron pasar por trabajadores de un motel de una comunidad indígena para ser vacunados. La situación generó indignación en Canadá y piden sanciones.

Un millonario canadiense y su pareja generaron un escándalo en Canadá al fingir que eran trabajadores en una comunidad indígena para colocarse la vacuna contra el coronavirus. Se trata de Rodney Baker (55), empresario de la industria del juego, y Ekaterina Baker (32), su pareja actriz.

La pareja mintió para ser vacunada contra el covid-19 perjudicando a los miembros de una comunidad indígena cercana a los límites con Alaska. Si bien inicialmente fueron multados económicamente, la sanción podría agravarse por la indignación social que ha generado la situación.

Según consignó Yukon News, los Baker viajaron desde Vancouver, Columbia Británica, a Whitehorse, capital del territorio del Yukón, el 20 de enero. Dos días después, pagaron los servicios de un avión chárter para aterrizar a 540 kilómetros, en Beaver Creek, una comunidad de un centenar de personas, en su mayoría de población autóctona.

El gobierno de Justin Trudeau se comprometió a reservar ciertas cantidades de vacunas para destinarlas a poblaciones indígenas ubicadas en zonas remotas. Tal ha sido el caso de Beaver Creek, donde una clínica móvil comenzó el 18 de enero a administrar la vacuna desarrollada por Moderna.

Rodney y Ekaterina Baker recibieron la vacuna mintiendo y asegurando que eran trabajadores de un motel de la zona. Incluso mostraron al personal sanitario credenciales de seguro médico de las provincias de Ontario y Columbia Británica, afirmando que residirían poco tiempo en Yukón.

Los sanitarios, ya con ciertas dudas, se sorprendieron cuando el matrimonio pidió luego ser conducido al pequeño aeropuerto de la comunidad. Llamaron entonces al motel mencionado por los Baker y recibieron la confirmación de que no formaban parte de la plantilla de empleados, así que decidieron contactar a las autoridades.

El millonario y la actriz se disponían a tomar un vuelo para volver a su hogar en Vancouver. Cada uno fue multado con el equivalente a unos 900 dólares estadounidenses al haber violado dos disposiciones de la ley de medidas civiles de urgencia: no haber respetado el confinamiento obligatorio de 14 días y mentir en una declaración jurada.

La normativa señala que estas acciones podrían conllevar penas de seis meses de cárcel. Angela Demit, jefa de la reserva indígena de White River, afirmó en un comunicado: "Estamos muy preocupados por las acciones de individuos que ponen en peligro a nuestros mayores y a nuestra gente más vulnerable".

Tras el escándalo, Rodney Baker renunció al cargo de consejero delegado de Great Canadian Gaming Corporation, compañía que posee hipódromos y casinos en diversos puntos de Canadá. El país reportó más de 774.000 casos de coronavirus y cerca de 870.000 canadienses ya recibieron la primera dosis de la vacuna.