El rival de Boca se llevó un 0-0 de La Bombonera y definirá en el Mineirão, donde es muy fuerte y ganó todo lo que jugó en este certamen.
Apesar de la polémica por el gol anulado a Boca a instancias del VAR y todo lo que se habló, Atlético Mineiro se volvió de La Bombonera con un empate 0-0 que lo deja con confianza para la revancha, que se jugará mañana desde las 19.15. Sobre todo por su enorme fortaleza jugando de local.
El desquite en Brasil tendrá una doble mirada: si el Xeneize hace al menos un gol, en local deberá remontar mucho terreno; pero la confianza de los de Cuca pasa por el hecho de sentirse muy cómodo en el Mineirao, su casa.
En la fase de grupos terminó como el mejor primero, con números muy buenos: obtuvo 16 puntos, no tuvo fisuras de ningún tipo, venció en cinco cotejos y empató uno. En su casa ganó todo lo que jugó, hizo diez goles, le hicieron uno solo y dejó en claro que todos los que van terminan sufriendo.
La fortaleza del Mineiro como local no viene sólo de ahora sino que hasta principios de 2019 había perdido sólo dos encuentros como local de los 40 disputados por Copa Libertadores, con 26 triunfos y 12 empates. Por eso Boca tendrá que tener mucho cuidado.
El equipo de Matías Zaracho e Ignacio Fernández se coronó campeón del último Campeonato Mineiro, del Estado de Minas Gerais, y en el actual Brasileirao está tercero, a tres puntos del líder, y también exhibió que como local es sólido.
En la primera fecha cayeron 2-1 contra el Fortaleza de Juan Pablo Vojvoda pero luego empataron uno y ganaron tres. Boca no la pasó bien las últimas veces que viajó a Brasil para enfrentar a Santos pero con la estadística en mano irá con la ilusión de volverse con el boleto a los cuartos de final.
